TAPACHULA.- Debido a la renuencia del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que se opone a que los trabajos de la construcción de la autopista Federal Tapachula-Frontera Talismán, pasen por las ruinas arqueológicas de Izapa; estos se han visto retrasados.
“Por ahí se sabe que nada más hasta el kilómetro diez va a llegar, entonces necesitamos nosotros saber qué tanto de cierto sea eso, entonces nosotros pedimos a la SCT nos den una información verídica”, estableció Francisco Escobar, habitante del kilómetro 9.5.
Y es que los retrasos han dado paso a formar diversas versiones entre la ciudadanía y funcionarios municipales, como el hecho de que los recursos federales destinados a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) por él Presidente, Felipe Calderón Hinojosa, se han acabado.
“Estamos en una incertidumbre, precisamente no sabemos nada del proyecto de la carretera que avanza muy lento, entonces nosotros necesitamos saber los avances; por ahí se ha escuchado que los recursos se han agotado”, denuncio el afectado.
Otra hipótesis se centra en que el INAH ha rechazado a través de un oficio todas las propuestas de la SCT para poder de alguna forma continuar con la construcción sin afectar la zona arqueológica.
Con ello los más de 300 habitantes a quienes el Gobierno Federal les debe el 50 por ciento del valor de sus tierras expropiadas para construir la autopista,
exigen una explicación de por la lentitud del proyecto que no avanza y no se ve como la carretera más moderna de México; tal y como les fue presentado en un principio.
“Al principio nos presentaron un proyecto supermoderno, nos dijeron que iba a ser la mejor carretera de México, que iba a ver teléfonos, pozos profundos y andadores y por lo visto no se ve nada de eso”, añadió.
Lo cierto es que mientras los habitantes viven en la incertidumbre, el desarrollo anunciado en ese lugar por el Presidente Felipe Calderón, no se ve llegar con la renuncia del INAH y los trabajos lentos de la constructora española “Azvi” auspiciada por la SCT. (BAV)
“Por ahí se sabe que nada más hasta el kilómetro diez va a llegar, entonces necesitamos nosotros saber qué tanto de cierto sea eso, entonces nosotros pedimos a la SCT nos den una información verídica”, estableció Francisco Escobar, habitante del kilómetro 9.5.
Y es que los retrasos han dado paso a formar diversas versiones entre la ciudadanía y funcionarios municipales, como el hecho de que los recursos federales destinados a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) por él Presidente, Felipe Calderón Hinojosa, se han acabado.
“Estamos en una incertidumbre, precisamente no sabemos nada del proyecto de la carretera que avanza muy lento, entonces nosotros necesitamos saber los avances; por ahí se ha escuchado que los recursos se han agotado”, denuncio el afectado.
Otra hipótesis se centra en que el INAH ha rechazado a través de un oficio todas las propuestas de la SCT para poder de alguna forma continuar con la construcción sin afectar la zona arqueológica.
Con ello los más de 300 habitantes a quienes el Gobierno Federal les debe el 50 por ciento del valor de sus tierras expropiadas para construir la autopista,
exigen una explicación de por la lentitud del proyecto que no avanza y no se ve como la carretera más moderna de México; tal y como les fue presentado en un principio.“Al principio nos presentaron un proyecto supermoderno, nos dijeron que iba a ser la mejor carretera de México, que iba a ver teléfonos, pozos profundos y andadores y por lo visto no se ve nada de eso”, añadió.
Lo cierto es que mientras los habitantes viven en la incertidumbre, el desarrollo anunciado en ese lugar por el Presidente Felipe Calderón, no se ve llegar con la renuncia del INAH y los trabajos lentos de la constructora española “Azvi” auspiciada por la SCT. (BAV)
Señores: El INAH no se opone al progreso, nos oponemos a que una autopista que pudo haber sido debidamente trazada, en la cual se programó un gasto de casi dos mil millones de dólares, mutile un sitio arqueológico que pretende ser usado como atractivo de la zona, en qué cabeza cabe mutilar un sitio que va a ser atractivo focal? Habrá que preguntarle a todos los habitantes de la zona, especialmente a aquellos que se ampararon porque SCT les quería dar una miseria como indemnización, a teléfonos de México, compañia que hasta hace algunos meses no había retirado su cableado y fibra óptica (45 km de cables, postes y ductos). Los culpables son aquellos que pretendieron meter a fuerza una "moderna autopista" diseñada con las patas, sin liberación previa del derecho de vía, pasando por encima de declaratorias presidenciales de protección al patrimonio, desmenbrando comunidades, y lo peor de todo, otorgada en concesión a 20 años al grupo AZVI, quién va a construir un caminito cualquiera y cobrará como si fuera autopista europea. Hay razones poderosas para defender Izapa, hay mucho dinero de por medio, los vecinos del lugar merecen que se les pague lo justo por sus terrenos, SCT tiene ya la modificación para que la autopista no mutile Izapa, Luís Téllez es responsable de cualquier evento fuera de la legalidad, pero ahora está protegido en los Pinos.
ResponderEliminarhttp://joseluiscastillejos.files.wordpress.com/2007/03/cusco.jpg
ResponderEliminarLos invito a consultar este link para que vean los que una constructora hizo en lima destruyo un muro inca y en su lugar contruyo un centro comercial.
Pregunto ¿eso es lo que queremos que suceda con izapa? creo ya perdimos demasiada identidad queremos continuar perdiendo hasta nuestro patrimonio cultural?
Creo lo que las autoridades del INAH an hecho estan en lo correcto